El teletrabajo es una forma de trabajar que ya está muy extendida. Por lo tanto es necesario replantear los espacios y crear un espacio de trabajo ergonómico con la ayuda de la tecnología.
Durante el confinamiento, los hábitos laborales han cambiado: el teletrabajo se ha convertido en una forma de trabajar en toda regla, destinada a quedarse.
Por esta razón es necesario afrontar estos nuevos hábitos laborales y replantear los espacios del hogar, empezando precisamente por el espacio para trabajar desde casa.
¿Cómo crear un estudio en casa? El mobiliario imprescindible
Si tenemos en cuenta que las personas que teletrabajan lo hacen prácticamente siempre sentados, hay que tener en cuenta el tipo de asiento: las sillas normales no son la solución ideal para quien tiene que estar en un escritorio durante al menos ocho horas. Hay sillas de oficina que pueden adaptarse al estilo de tu hogar: lo importante es que sea un modelo ergonómico, con un respaldo alto y envolvente, si dispone de apoyabrazos regulables todavía mejor y, preferiblemente, con ruedas, para permitir movimientos fluidos.
El mueble para poder teletrabajar más importante sigue siendo el escritorio. Si disponemos de ventana, debe estar situada a la derecha o a la izquierda de la persona sentada, nunca delante o detrás. La mesa ideal permite regular su altura y ofrece suficiente espacio para colocar un monitor, el teclado y el ratón pero también algunos complementos de decoración como una lámpara y una planta, que contribuyen a la concentración y el bienestar.
Espacio de trabajo ergonómico: 5 trucos
¿Cómo conseguir que el espacio de trabajo sea más ergonómico y productivo? Prueba con estos sencillos trucos:
- Espalda recta, hombros relajados y codos alineados: ajusta la altura de la silla para que las rodillas formen un ángulo de unos 90 grados, con los pies bien apoyados en el suelo; luego súbela o bájala para que quede justo debajo de los codos y los brazos sigan una línea recta.
- Pantalla a un brazo de distancia: deberá corresponder a la longitud de tus brazos con los puños cerrados. Asegúrate de que la parte superior de la pantalla esté alineada con los ojos para evitar tensión en el cuello.
- Ratón y teclado cerca: para no tener que estirar la mano para utilizarlos. Las muñecas tienen que estar rectas y alineadas con los antebrazos.
- Iluminación: además de la luz natural, se recomienda tener al menos dos puntos de luz. Una lámpara de techo y una lámpara de escritorio orientable te ayudarán a no sobrecargar la vista y a mantener la concentración adecuada.
- Aplicación para smartphone: Internet te puede ayudar a organizar y optimizar tu jornada laboral. Con la aplicación hOn puedes controlar a distancia todos tus electrodomésticos conectados: enciende el horno de la cocina y, mientras tú trabajas, él te prepara el almuerzo, ¿o te has olvidado de encender el lavavajillas? ¡Enciéndelo tranquilamente durante una videollamada!
Con un poco de atención y una serie de detalles, se puede crear un espacio de trabajo en casa sin nada que envidiar a tu oficina.